Una sala de reuniones con mucho estilo

Si pensamos en una sala de reuniones, la primera imagen que nos viene a la cabeza es un sitio poco acogedor, con poco estilo. Por ello, hoy os vamos a dar las claves para hacer de esta zona de nuestra oficina un lugar en el que apetezca estar, que consiga hacernos sentir como en casa. Uno de los elementos principales de una sala de reuniones es una mesa, en torno a la que poder reunirnos, pero no hemos elegido la clásica mesa de madera rectangular, sino una de unas dimensiones un poco más reducidas, pero que al ser redonda tiene capacidad para un número similar de personas. El color que hemos preferido es el blanco, perfecto para aportar un toque de luminosidad a la estancia.


En cuanto a las sillas que hemos elegido, su principal característica es su comodidad, su respaldo envolvente es ideal para pasar largas jornadas de reuniones sentados en ellas. Al igual que la mesa, el color de las sillas también es blanco, creando una zona elegante y acogedora. Como mueble adicional, nos hemos decantado por un aparador con puertas donde guardar archivadores, carpetas, y todo lo necesario para nuestro trabajo del día a día.

¿Qué os parece esta propuesta para una sala de reuniones?

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